Cada 3 de diciembre conmemoramos el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, una fecha que invita a reflexionar sobre el papel clave que tiene la tecnología en la garantía de derechos, la participación social y la construcción de oportunidades reales para todas las personas.
En los últimos años, herramientas como la impresión 3D han dejado de ser un recurso exclusivo de ámbitos técnicos para convertirse en instrumentos accesibles que pueden transformar la vida cotidiana. En proyectos y formaciones recientes —como el webinar “Descubre la impresión 3D: crear objetos con propósito”— se evidencia cómo esta tecnología puede servir como un puente hacia la inclusión digital, especialmente para personas con diversidad cognitiva.
La tecnología como vehículo de participación
La impresión 3D abre puertas a experiencias donde las personas pueden crear, diseñar y materializar ideas. Esta capacidad no solo fomenta la creatividad, sino que contribuye a un aspecto fundamental: el ejercicio activo del derecho a participar en la vida social, cultural y educativa.
Permitir que cualquier persona pueda fabricar objetos adaptados, útiles o expresivos es una forma tangible de garantizar que pueda influir en su entorno, tomar decisiones y desarrollar proyectos propios. Porque cuando la tecnología se pone al servicio de las personas, se convierte en una herramienta de autonomía, expresión y empoderamiento.
Nuevas oportunidades desde un uso crítico y responsable
La clave no es solo disponer de tecnología de última generación, sino promover un uso crítico, reflexivo y responsable. Esto implica:
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Diseñar actividades accesibles y comprensibles.
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Acompañar los procesos para fomentar la autonomía real.
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Crear espacios seguros donde experimentar sin miedo al error.
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Garantizar que la innovación tecnológica se alinee con los principios de inclusión, equidad y respeto.
Solo así la tecnología puede evolucionar de herramienta a oportunidad vital, especialmente para quienes tradicionalmente han tenido menos acceso a recursos digitales y educativos.
Un futuro inclusivo se diseña hoy
La inclusión no es únicamente un objetivo social: es un proceso vivo que se construye con acciones cotidianas, decisiones conscientes y tecnologías pensadas para sumar, no excluir.
En este Día Internacional de las Personas con Discapacidad, recordemos que la impresión 3D —y la tecnología en general— tiene el potencial de ampliar horizontes, abrir caminos y hacer que la participación en la vida real sea una experiencia accesible, creativa y significativa para todas las personas.
Tic Tac Capacitación Digital es un proyecto de Fundación Esplai financiado por los fondos procedentes del 0,7% del IRPF, gestionados por el gobierno a través del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030.