El pasado 1 de octubre celebramos en el Centro de Mayores de El Carrascal, en Leganés, un encuentro muy especial. Jóvenes y personas mayores del municipio se reunieron para compartir una tarde de aprendizajes, risas y descubrimientos. ¿El pretexto? La tecnología. ¿El objetivo? Crear puentes entre generaciones.
A menudo se dice que la tecnología nos aísla, que cada generación vive en su propia burbuja digital. Pero en Fundación Esplai creemos justo lo contrario: que la tecnología puede ser una herramienta para unirnos, escucharnos y romper estereotipos.
Porque sí, tanto jóvenes como mayores cargan con etiquetas que no siempre se ajustan a la realidad. Que si los y las jóvenes no tienen paciencia, que si las personas mayores no se atreven con lo nuevo… Nada más lejos de lo que vivimos en este encuentro.
Propusimos un reto nada fácil: que los y las jóvenes enseñaran a las personas mayores a usar tecnologías completamente nuevas para ellas. Y así fue como, con mucha paciencia, cariño y complicidad, se pusieron manos a la obra con gafas de realidad virtual, drones e incluso herramientas de inteligencia artificial.
Juntas y juntos viajaron a otros países sin moverse del sitio, pilotaron drones sorteando obstáculos y descubrieron cómo la IA puede ayudar a crear cuentos, planificar menús o hacer la lista de la compra. Una experiencia inmersiva, divertida y, sobre todo, muy humana.
“Ya verás como le diga ahora a mi hija, que es ingeniera, que por fin he entendido qué es la inteligencia artificial”
Fue una tarde entrañable, en donde quedó patente que cuando se juntan generaciones, se multiplican las ganas de aprender, de compartir y de construir juntas un mundo más justo, inclusivo y conectado.